Cada día falta menos para la Semana Santa, que, este año, se adelanta a la semana del 24 y 25 de marzo. Como siempre, miles de coches llenarán nuestras carreteras camino del pueblo, de la playa o de cualquier destino turístico donde disfrutar de esos días de vacaciones tan merecidos. Antes de viajar, hemos de revisar los neumáticos del turísmo, pero también debemos preparar el coche para viajar en Semana Santa:
- Neumáticos: además de medir la profundidad, no olvides comprobar la presión, ya que, al viajar más cargado que de costumbre, puedes necesitar un aumento de la presión. También debes llevar la rueda de repuesto.
- Motor: una revisión rápida puede detectar esa pequeña fuga que te puede arruinar el viaje. Comprueba también que no deje manchas en el suelo. Si estás a punto de alcanzar el tope de kilómetros, antes de la revisión; mejor, pásala antes de viajar.
- Frenos, aceite y líquidos: comprueba el estado de los discos, pastillas y líquidos de freno y los niveles de aceite (en especial, si lo cambiaste hace tiempo). Presta atención también a los líquidos de refrigeración y dirección, al estado del limpiaparabrisas o al agua.
- Luces: un elemento de seguridad vital en la carretera. Antes de partir, comprueba que los faros están limpios y a la altura correcta y que funcionan. Si no es así, acude al taller, a reparar las luces. Y no olvides las luces de recambio y las herramientas, por si debes cambiarlas durante el viaje.
Finalmente, asegúrate de que los filtros, el asiento o el aire acondicionado están en perfecto estado, ya que la comodidad es clave, para circular de forma segura. Recuerda también llevar el chaleco reflectante en un sitio accesible desde el asiento del conductor, los triángulos de emergencia y toda la documentación del vehículo (incluida la póliza del seguro). Esperemos no tener que utilizar estos artículos, pero es obligatorio llevarlos.
Os deseamos unos felices días de descanso!